Kikos de chufa
Un aperitivo diferente y muy fácil.
-Chufas
-aceite de girasol, ( o de semillas,...)
-agua y sal
Rehidratamos las chufas en agua de un día para otro.
Cuando hayan doblado su volumen, se escurren y se secan bien con papel de cocina, para que luego no salte el aceite.
Ponemos la chufas en un cazo donde quepan todas y las cubrimos de aceite. Calentamos a muy baja temperatura y dejamos que se confiten unos 30 minutos.
Pasado este tiempo, las sacamos escurridas a una fuente para que se enfríen.
Volvemos a calentar el aceite, esta vez a fuego fuerte y vamos friendo por tandas las chufas, sin que tomen demasiado color.
Las sacamos sobre papel absorbente y salamos cada tanda cuando aún están calientes.
Una vez frías, se pueden guardar en tarros de cristal.
Comentarios
Publicar un comentario
Deja aquí tus comentarios y dudas. Gracias!